Tomás Drelichman ganó un partido muy chivo contra
Desamparados y una de las figuras fue Matías Heimann. Con camiseta de la
selección de Brasil y un número 0 improvisado con cinta, el delantero fue el
jugador destacado del encuentro.
Por Martín Wajsbrut
TdeA: Lo buscaron permanentemente, casi lo pierden, y sobre
el final lo pudieron ganar.
MH: Fue un partido duro, un rival muy parejo. Nosotros
arrancamos el torneo muy flojo y necesitábamos estos tres puntos. Después del
primer gol nos dormimos, nos empezaron a llegar, y después que lo dieron vuelta
activamos, lo empatamos, y lo pudimos dar vuelta sobre el final.
TdeA: Metiste el empate y estuviste cerca varias veces, ¿Te
hubieses ido con bronca si no se daba la victoria?
MH: La verdad que sí. Lo importante para el equipo es
ganar, y yo que soy delantero tengo que
hacer goles. No haber podido cumplir haciéndolo, si no terminábamos ganando, me
hubiese dejado amargado. Por suerte salieron las cosas y ganamos los tres
puntos.
TdeA: Habían llegado al partido con el mismo puntaje que
Desamparados, ¿Cómo vivieron el trámite?
MH: Había que ganar sí o sí. Nosotros estábamos nerviosos y
respetábamos al rival. Pero también teníamos confianza y por suerte se dio todo
como esperábamos.
TdeA: ¿Cómo surge el equipo y a qué se debe el nombre?
MH: Tomás es nuestro capitán y la verdad que no se nos
ocurrió otro nombre. Somos un grupo de amigos del club y salió la idea de armar
un equipo de fútbol 8.
TdeA: ¿Ya jugaron antes fútbol 8?
MH: No, es la primera vez que jugamos todos juntos. Algunos
jugamos fútbol 11 en otros momentos, pero esto nunca.
TdeA: Con este resultado, ¿Sueñan con los playoff?
MH: Nuestro objetivo es clasificar y llegar lo más lejos
posible.
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